¿Qué documentación debo preparar?
El primer paso para iniciar el proceso de Inspección RETIE de tu instalación es solicitar una cotización. Para ello, debes aportar información muy básica, como el nombre y ubicación exacta de tu proyecto, así como tus datos de contacto (es posible que un analista comercial te llame para consultar algunos detalles adicionales, como el tamaño de la obra). Si quieres acceder a un formulario muy sencillo para solicitar la cotización de tu inspección, haz clic aquí.
Pero luego de formalizar la relación comercial, el Organismo Evaluador de Conformidad acreditado por ONAC que inspeccionará tu instalación te solicitará cierta documentación, que es bueno que vayas preparando. Generalmente, se requiere lo siguiente:
- Planos eléctricos de la obra: son los diagramas y dibujos de ingeniería que describen con precisión la forma como están interconectados y ubicados los elementos que componen la instalación. Estos documentos deben ser firmados por el profesional competente responsable de la dirección o construcción directa de la instalación eléctrica.
- Memorias de cálculo: este documento describe los cálculos y procedimientos que emplearon los diseñadores de la instalación para llegar a las cantidades, configuración y distancias (entre otros) de los equipos que componen tu instalación. Es como la hoja de cálculo que usábamos en los exámenes del colegio para registrar las cuentas con las que llegábamos a la respuesta correcta. También deben estar firmados por el diseñador.
- Declaración de cumplimiento: este documento, también conocido como “certificado de primera parte”, es una declaración firmada por el profesional competente que estuvo a cargo de la construcción de tu instalación, manifestando bajo gravedad de juramento que lo construido e instalado cumple con el RETIE.
Un problema común en ciertos tipos de instalaciones es que el constructor no entrega la declaración de cumplimiento y luego no es posible iniciar el proceso de inspección de la instalación. Entonces, debes tener muy presente que sin este documento no deberías recibir a satisfacción la construcción de tu instalación.
Si necesitas un formato para realizar tu declaración de cumplimiento, puedes consultar el artículo 34.9 del RETIE o hacer clic aquí.
- Certificados de productos utilizados en la instalación: estos certificados son emitidos por un Organismo Evaluador de la Conformidad acreditado por ONAC y garantizan que los cables, aisladores, tableros, medidores, conectores, entre otros equipos usados en tu instalación cumplen con todas las especificaciones de calidad y condiciones de seguridad que especifica el mismo RETIE. Debes pedir estos certificados al fabricante de los productos de tu instalación o al comercializador que te los vendió.
¿Cómo es el proceso de inspección?
Una vez formalices el servicio de inspección, se ejecutarán los siguientes pasos:
- Asignación del inspector competente: el Organismo Evaluador de la Conformidad deberá designar un profesional que cuente con los certificados de competencias vigentes y acordes con el tipo de instalación que se va a inspeccionar. No todos los inspectores pueden emitir juicios sobre todos los tipos de instalaciones, así como un pediatra no debería diagnosticar ciertas afecciones que son competencia de un cardiólogo. El inspector designado será quien te acompañará a lo largo del proceso de inspección.
- Revisión documental: El inspector realizará una revisión detallada de los documentos exigidos por el RETIE. Dependiendo del tipo de instalación, pueden variar o ser más o menos exigentes, pero por lo general se trata de los cuatro documentos que ya te habíamos recomendado preparar (planos, memorias de cálculo, declaración de cumplimiento y certificados de producto).
El inspector revisará que estos documentos sean auténticos, que contengan la totalidad de los campos reglamentarios, que los profesionales que los firmaron cuenten también con las competencias y la documentación en regla… en fin, un trámite de papeleo para verificar que todo esté bien.
Otro punto importante es que la revisión documental ayuda a realizar una mejor planeación de la inspección: si tu construcción es muy grande, el inspector puede hacerse una idea de cuál recorrido va a realizar más adelante por la instalación, cuántas medidas va a tomar y cuáles son los puntos críticos por revisar.
- Realización de la visita en campo: finalizada la etapa anterior, el inspector se desplazará presencialmente hasta tu instalación para revisarla, verificando que lo construido esté de acuerdo con los diseños y la demás documentación revisada previamente. Además, el inspector podrá tomar algunas mediciones de variables eléctricas.
Las medidas pueden variar dependiendo del tipo de instalación, pero las más comunes son resistencia de puesta a tierra, aislamiento, distancias de seguridad, entre otras, que son necesarias para verificar el estado de los materiales, los equipos y de la instalación y dar cumplimiento al RETIE.
A medida que el inspector adelanta la visita, dejará constancia de los hallazgos mediante el registro fotográfico y el diligenciamiento de ciertos formatos que luego serán insumo para la emisión del dictamen.
- Emisión del dictamen de inspección: finalizada la visita en campo, el inspector revisará todas las evidencias recopiladas y entregará un informe de su visita que debe ser avalado por el Organismo Evaluador de la Conformidad al cual está adscrito. Luego de esto, se emitirá un documento oficial, el tan anhelado dictamen de inspección, que constituye la prueba de que tu instalación cumple o no con el RETIE.
Si todo salió bien, ¡felicitaciones! Ya cuentas con un soporte legal de que tu instalación es segura, tienes un respaldo en caso de accidentes de tipo eléctrico y evitas posibles sanciones de la SIC o las autoridades locales.
Pero ¿y qué pasa si no todo salió bien?
Si el inspector encontró algún aspecto que constituye una violación al RETIE, deberá declararlo como una “No Conformidad” y tu dictamen indicaría que la instalación no cumple con el reglamento.
Pero esto no es el final: cuando se encuentran No Conformidades, el inspector debe informarlas al constructor para que sea resueltas. Si son aspectos menores, lo más probable es que se llegue a un acuerdo de que una vez suministradas las evidencias de las correcciones se emitirá el dictamen favorable; si la No Conformidad es de mucho peso y se necesita modificar en gran parte la instalación, el inspector y el cliente deben acordar unos plazos para que estas situaciones sean corregidas y será necesario contratar una visita adicional (con el mismo inspector) para verificar que todo fue subsanado. Una vez realizada esta segunda visita, obtendrás finalmente tu dictamen de inspección favorable.
Si quieres asesoría sobre el proceso de inspección de instalaciones o los requisitos particulares que debe cumplir tu instalación, da clic en el botón según corresponda.