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Reduce la huella de carbono: captura, almacenamiento y transporte de CO2.

Por Jaime Rosero
abril 17, 2023

CO2: CONCEPTOS BÁSICOS PARA QUE ESTÉS AL DÍA EN ESTA CONVERSACIÓN

A principios del siglo XIX, los científicos observaron cambios en el clima, que daban lugar al efecto invernadero natural. Sin embargo, este fenómeno ha sido acelerado por actividades del ser humano, como la quema de combustibles fósiles, la deforestación, la cría de ganadería extensiva, entre otros. Debido a esta aceleración del calentamiento global, en 1988 se estableció el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) encargado de la identificación y evaluación del cambio climático.

En este proceso de cambio climático, el protagonista ha sido el Dióxido de Carbono o CO2. Este gas lo encontramos en la atmosfera y permanece en ella por más de 1.000 años. Su función es conservar el calor generado por la radiación infrarroja de los rayos de sol para mantener la temperatura de la tierra en un punto óptimo. Sin embargo, los seres humanos hemos generado mucho CO2 a través de procesos industriales, uso de combustibles fósiles, fabricación de fertilizantes, acero, hierro, entre otros y adicionalmente hemos deforestado los bosques, quienes eran los encargados de procesar el CO2, convirtiendo de esta manera al CO2 en el responsable del 70% del calentamiento de la tierra y por ello es el protagonista.

Desde el siglo XIX los expertos del IPCC indicaron que para desacelerar el cambio climático era necesario crear mecanismos alrededor del CO2 y de los gases que estaban generando el efecto invernadero. Por ello, en 1992 más de 197 países participaron en la Convención del Marco de las Naciones Unidas sobre el cambio climático, el cual tuvo como objetivo lograr acuerdos para la estabilización de concentración de Gases de Efecto Invernadero (GEI) en la atmósfera y en 1997 con mayor determinación, 36 países industrializados y la Unión Europea ratificaron su compromiso en la reducción de GEI mediante la firma del Protocolo de Kioto.

Desde entonces, se están desarrollando tecnologías, reglamentos, leyes, incentivos, etc, para lograr la reducción de los GEI y un especial esfuerzo dirigido a la CAPTURA, ALMACENAMIENTO, TRANSPORTE y USO del CO2.

A continuación, te contaremos qué es la captura, almacenamiento, transporte del CO2 y los usos que hoy en día tiene. Con esta información, estarás listo para entablar una conversación en esta temática.

¿Qué es la CAPTURA, ALMACENAMIENTO y TRANSPORTE de carbono?

Básicamente, la CAPTURA DE CARBONO es un proceso tecnológico que tiene como objetivo separar el CO2 del resto de moléculas presentes en los procesos industriales anteriormente mencionados, para posteriormente ser recolectado, almacenado y/o transportado para su uso, antes de que sea liberado a la atmosfera. Las técnicas utilizadas para la captura del carbono se dividen de acuerdo al momento en que se da la captura. Las técnicas son: Pre-combustión, Postcombustión y Oxicombustión. La tecnología más madura que existe en el mercado para la captura de carbono es la absorción química, también existen otras tecnologías que están en desarrollo como, las membranas y la separación criogénica, que prometen ser comercialmente viables en un futuro.

Una vez se capturado el CO2, es necesario TRANSPORTARLO para ser utilizado o almacenado. Existen dos maneras eficientes de transportar el CO2, por medio de ductos y a través de buques. El uso de cada uno dependerá de la distancia y de la cantidad de CO2 que se necesite trasportar.

A parte de estas dos maneras de transporte de CO2 existen otras alternativas: por tren y vehículos de carga pesada. Estas opciones pueden ser utilizadas para distancias pequeñas y cargas de CO2 bajas, sin embargo, presentan un alto costo en comparación de los barcos y tuberías. En todos los casos, el CO2 capturado se maneja y transporta de manera segura y controlada para minimizar riesgos y garantizar la protección de la salud pública y el medio ambiente. Como se indicó en el PIGCCME 2050 del 2021 “la forma más eficaz de transportar el CO2 es en fase supercrítica. El punto crítico en el que el CO2 existe en fase supercrítica es de 1.070 psi (73 atmósferas (atm)) y 88 F (31 C).”

Pasando al ALMACENAMIENTO, el CO2 capturado se puede almacenar de varias maneras, una forma es mediante la inyección del gas capturado en reservorios geológicos subterráneos; reservorios que suelen estar a más de a 800m de profundidad. Actualmente la inyección de CO2 se hace en formaciones salinas profundas y/o en yacimientos agotados de petróleo y gas. Mediante esta técnica, la capacidad de almacenamiento dependerá de las características geológicas de las regiones. Países y regiones como África, Rusia, Estados Unidos, Centro-Sur América y Australia tienen mayor capacidad de almacenamiento de CO2. Es importante destacar que el almacenamiento de CO2 en reservorios geológicos subterráneos es una tecnología en desarrollo y está sujeta a regulaciones y estándares rigurosos para garantizar la seguridad y la protección ambiental.

¿Es posible utilizar el CO2 capturado en procesos industriales?

La respuesta es SI. Hoy en día el CO2 es necesario para la fabricación de los productos que utilizamos, para la preservación de alimentos, el combustible que utilizamos en el transporte, entre otras actividades que listamos a continuación:

 

  • Procesamiento de alimentos y bebidas
  • Gas en las gaseosas, incluso en la cerveza
  • Empacado de ensaladas o carne fresca
  • Fabricación de hielo seco
  • Procedimientos médicos
  • Producción de medicamentes (Ej. Aspirinas)
  • Extracción del petróleo
  • Fabricación de combustibles
  • Aturdir animales en el momento de sacrificarlos (cerdos y pollos)
  • Conservación de la leche
  • Cultivo de algas como FERNC
  • Producción de cemento
  • Apagar incendios
  • Cultivos de flores
  • Producción de papel

 

 

Pero, ¿Será que como personas “de a pie” podemos hacer algo más para mitigar los GEI y aportar a la desaceleración del cambio climático?

La respuesta es SI y las personas podemos contribuir a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, incluido el dióxido de carbono, adoptando prácticas sostenibles en nuestros hogares y comunidades. Algunas prácticas son:

  • Plantación de árboles: Plantar árboles es una de las formas más efectivas de capturar carbono. Los árboles absorben el dióxido de carbono de la atmósfera durante la fotosíntesis y lo almacenan en sus hojas, troncos y raíces.
  • Compostaje: El compostaje es un proceso que transforma los residuos orgánicos en abono, reduciendo así la cantidad de dióxido de carbono liberado al medio ambiente.
  • Eficiencia energética: Mejorar la eficiencia energética de su hogar, automóvil y electrodomésticos puede reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, incluido el dióxido de carbono.
  • Cambios en la alimentación: Adoptar una dieta baja en carne puede ayudar a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas con la producción de alimentos, incluido el dióxido de carbono.

Para que continues enriqueciendo tu conocimiento en este tema, te invitamos a leer nuestro próximo blog, en el cual te contaremos como ha avanzado la NORMATIVIDAD Y LA REGULACIÓN respecto a la captura, almacenamiento, transporte y uso del dióxido de carbono y los incentivos que han creado algunos países en el mundo para que más empresas se motiven a implementar prácticas para mitigar o capturar el CO2 en sus procesos industriales.

Escrito por:

Jaime Rosero Rodríguez

Estudiante de Ingeniería Eléctrica

Estudiante en Práctica en Consultoría del CIDET

https://cidet.org.co/inteligencia-negocios/

https://www.linkedin.com/in/jaime-andres-rosero-rodr%C3%ADguez-4b1172210

 

Categorías: Industria, Investigación